viernes, 25 de julio de 2014

Incendios: más medios, pocos pirómanos

  • El Informe Anual de Seguridad Nacional concluye que de los 2.778 incendios investigados en 2013, únicamente 102 tuvieron origen intencionado
  • Con su capacidad NRBQ, la UME alcanza este año la operatividad completa


Carlos Penedo. Artículo publicado originalmente en Estrella Digital.
Cogolludo (Guadalajara) es el último nombre asociado a la devastación de las llamas en España, que se moviliza todos los veranos contra la primera catástrofe de origen natural. Los medios van mejorando año a año y, para los más graves, destaca la Unidad Militar de Emergencias, que alcanzará este año su operatividad completa más allá de la ya total contra el fuego. Del análisis
de los incendios de 2013 sorprende que el origen intencionado y los actos vandálicos se encuentran en una mínima proporción de los casos.
A pesar de las más de 3.000 hectáreas afectadas en Guadalajara en los últimos días, el inicio del verano con unas temperaturas más suaves de lo normal ha tenido un efecto directo y positivo sobre el balance de este año hasta el 13 de julio: según datos del Ministerio de Agricultura, desde comienzos de 2014 la incidencia de las llamas ha caído en torno al 25% en comparación con la media de la década. Las cifras dicen que se han producido hasta mediados de julio 6.100 incendios, de ellos sólo cuatro afectando a más de 500 hectáreas, y se han quemado 29.000 hectáreas, cifras todas inferiores a la media de los últimos años (7.900 incendios –seis grandes- y 41.000 hectáreas afectadas de todo tipo de superficies, no sólo forestales, datos hasta mitad de julio).
A lo largo de todo el año 2013 se quemaron en España 59.000 hectáreas y del ejercicio destacaron 16 grandes incendios de los que diez se produjeron en el noroeste peninsular.
En los incendios más graves, a petición de la Comunidad Autónoma y coordinado por el Ministerio del Interior, acude la Unidad Militar de Emergencias –UME-, el principal instrumento del Estado contra este tipo de catástrofes.
Además de las condiciones meteorológicas, la propia existencia de la UME y su actuación es una de las principales novedades de la lucha contra el fuego, Unidad por ejemplo que no existía cuando hace nueve años, en otro incendio también en Guadalajara –Riba de Saelices- murieron 11 integrantes de un retén.
Desde su nacimiento en 2005 la Unidad Militar de Emergencias ha realizado 265 intervenciones -85% en incendios- y ha dejado atrás cualquier duda sobre su utilidad y las reservas con las que fue recibida por gran parte del colectivo militar, también por algunas fuerzas políticas.
Este año pone a disposición del Estado 1.500 militares de actuación directa y otros 1.500 de apoyo logístico que se movilizan desde sus cinco bases permanentes –Madrid, Valencia, Zaragoza, León y Morón (Sevilla). De este último lugar dependen efectivos desplegados en Canarias y de Valencia, en Baleares.
“Fuimos pioneros en la extensión de las Fuerzas Armadas a otros campos de la seguridad”, afirma el teniente general Muro en un reciente encuentro con la prensa, una “nueva visión” que extiende las capacidades militares más allá de los conflictos bélicos y acercan a las FAS a la sociedad y al campo más amplio de la seguridad. El responsable de la UME destaca el interés que la Unidad ha despertado y la estrecha relación que se mantiene con todos nuestros vecinos (Francia, Portugal y Marruecos) y especialmente con países latinoamericanos como Ecuador, Brasil, Colombia, Chile o México, que tienen en marcha iniciativas similares o lo quieren implantar.
Una de las novedades de la UME en la actual campaña de incendios es la capacidad de actuación nocturna, horas en las que por razones de seguridad tradicionalmente se interrumpían los medios aéreos o su actuación era poco efectiva por la altura obligada de las intervenciones. En concreto, la Unidad ha puesto en marcha este año una unidad móvil de operaciones nocturnas desde helicópteros con la capacidad de ubicar contenedores de agua y el personal para operarlos en tierra. Además en estos días la UME tiene previsto comenzar a utilizar micro drones, pequeños aviones sin piloto para la vigilancia de la zona de la catástrofe.
En relación con los incendios, el Informe Anual de Seguridad Nacional 2013, recientemente presentado en el Congreso por el director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, Jorge Moragas, ofrece datos de interés que en algunos casos destrozan tópicos de generosa circulación.
Dice el informe, sobre las causas de los incendios, que en 2013 las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado participaron en la investigación de 2.778 incendios, de los que únicamente 102 tuvieron origen intencionado. De ellos, 20 se debieron a conflictos cinegéticos –caza-, agrícolas y ganaderos; tres al descontento por la declaración de espacios protegidos; 21 a la quema de rastrojos; 49 a problemas psiquiátricos de los incendiarios; y nueve a actos vandálicos, causa esta última que repiten responsables políticos y medios de comunicación como origen casi exclusivo cada vez que aparece una llama en el monte.
Volviendo a la Unidad Militar de Emergencia, su responsable destaca que ha mantenido e incluso incrementado la operatividad en los últimos años, circunstancia que no se ha producido en otras unidades militares a causa de las restricciones presupuestarias.
El general Muro anuncia que a lo largo de este año la UME alcanzará la operatividad completa por los avances en la última de las capacidades pendientes, conocida como NRBQ –nuclear, radiológico, biológico y químico-. El personal ya está formado y únicamente queda por recibir algo del material que especializa la UME también en la respuesta ante emergencias en centrales nucleares y polígonos industriales con riesgo químico.
Cuando se cumple un año, el 24 de julio de 2013, del accidente de un tren Alvia en Angrois (La Coruña), cerca de Santiago de Compostela, en el que perecieron 79 personas y 146 resultaron heridas, la UME se encuentra instalando en sus dependencias de la base aérea de Torrejón (Madrid) un campo de catástrofes donde en breve podrán entrenar sus equipos y especializarse en accidentes ferroviarios y aéreos, intensificando la colaboración que ya hoy mantienen con ADIF y AENA.


Sugerencias




No hay comentarios:

Publicar un comentario